La jubilación marca el inicio de una nueva etapa en la vida, un tiempo para disfrutar de los frutos del trabajo y buscar nuevas formas de realización personal. Sin embargo, para algunos, esta transición también puede implicar una separación significativa, no solo del mundo laboral, sino también de roles familiares, sociales y económicos.
En este artículo, exploraremos los roles del «dejador» y el «dejado» en una separación post-jubilación, el papel de los hijos en esta fase, qué hacer con el capital acumulado a lo largo de los años, así como los aspectos positivos y negativos de esta transición y cómo un psicólogo puede brindar apoyo en este proceso.
La separación de muchos matrimonios después de la jubilación puede deberse a una combinación de factores complejos que interactúan entre sí. Aunque no existe una única respuesta que se aplique a todos los casos, aquí hay algunas razones comunes por las cuales algunas parejas deciden separarse tras jubilarse:
Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino aquellas que se adaptan mejor al cambio. (Charles Darwin)
Adaptarse al cambio nos permite avanzar.
La separación tras la jubilación puede crear cambios en la dinámica de una relación. El «dejador» es la persona que se retira y puede experimentar sentimientos de pérdida de identidad y propósito, ya que el trabajo a menudo define gran parte de su vida. Por otro lado, el «dejado» puede sentirse enfrentado a una nueva dinámica en la relación que no esperaba ni quería, donde la presencia constante del compañero jubilado era ansiada y tiene que lidiar con un escenario para el que no se encuentra preparado. Esto puede generar desafíos en cuanto a rutinas y espacios compartidos y un shock en la mayoría de las ocasiones.
Papel de los Hijos (si los hay):
Los hijos también pueden desempeñar un papel importante en este proceso. Pueden actuar como un apoyo emocional para ambas partes, ayudar en la adaptación a la nueva rutina y proporcionar perspectivas frescas. Sin embargo, es esencial que los hijos respeten los límites y la autonomía de sus padres durante esta transición, evitando asumir un papel excesivamente protector o controlador.
Capital Acumulado: ¿Qué Hacer?
El capital acumulado a lo largo de los años de trabajo es un recurso valioso en esta etapa de la vida. Algunos optarán por invertirlo para garantizar su seguridad financiera durante la jubilación, mientras que otros pueden decidir gastarlo en experiencias que no pudieron disfrutar plenamente durante su vida laboral. La decisión dependerá de las metas personales y familiares, así como de la situación financiera.
Pros y Contras:
La separación tras la jubilación tiene tanto aspectos positivos como desafiantes. Por un lado, puede brindar la oportunidad de enfocarse en pasatiempos, viajes y relaciones personales. Sin embargo, también puede generar estrés debido a la pérdida de estructura diaria, la necesidad de redefinir el propósito y la posibilidad de conflictos en la relación de pareja.
Impacto en la Vida:
Positivamente, la separación puede conducir a una mayor autodescubrimiento y desarrollo personal. Las personas pueden finalmente perseguir sus pasiones y aspiraciones postergadas. Por otro lado, el cambio puede llevar a la ansiedad, la soledad y la sensación de pérdida. A menudo, una combinación de apoyo emocional y profesional es esencial para enfrentar estos desafíos.
Acompañamiento Psicológico:
Es importante reconocer que, aunque la separación tras la jubilación puede ser una realidad dolorosa y difícil inicialmente para muchas parejas, muchas otras encuentran formas exitosas de adaptarse y fortalecer su relación en esta nueva etapa de la vida. La comunicación abierta, el respeto mutuo, la adaptación a los cambios y, en algunos casos, el asesoramiento profesional pueden ser herramientas valiosas para enfrentar los desafíos que surgen durante la jubilación.
Un psicólogo puede desempeñar un papel crucial durante esta etapa. Puede proporcionar un espacio seguro para expresar los sentimientos de pérdida, ansiedad o incertidumbre. Además, puede ayudar a las personas a explorar sus intereses y objetivos post-jubilación, brindando orientación para la transición y la redefinición del propósito en la vida.
En conclusión, la separación tras la jubilación es un proceso complejo que involucra cambios en roles, relaciones y dinámicas familiares. La gestión del capital acumulado, los pros y contras de la transición, y el papel de los hijos son elementos cruciales a considerar. A través del apoyo emocional y el acompañamiento psicológico, las personas pueden enfrentar este nuevo capítulo con resiliencia y encontrar una nueva fuente de satisfacción y bienestar.